jueves, 13 de noviembre de 2008

Miriam Makeba: Malaika na ku pende Malaika


Miriam Makeba, la cantante popular sudafricana, icono de la lucha contra el apartheid, falleció recientemente en Italia.

Quien fuera marginada por más de treinta años por el régimen racista sudafricano, murió en la localidad de Castel Volturno, a causa de un paro cardiaco, tras un concierto contra el racismo y la mafia en el que participaba.

Miriam Makeba subió al escenario luego de tres años de haberse retirado por problemas de salud. Lo hizo porque en esa misma localidad, hace un mes, la mafia había asesinado a inmigrantes africanos. Pese a su débil estado, hizo el esfuerzo de cantar nuevamente contra el racismo. Subió al escenario en silla de ruedas, acompañada por su nieta. Cantó tres canciones, la última de la tres fue el conocido tema Pata Pata. Recibió una gran ovación del público, cerró los ojos y no volvió a abrirlos. Murió pocos minutos después en un hospital.

La cantante que visitó Chile, durante la presidencia de Salvador Allende y saludó el proceso político de entonces, supo llevar como nadie al escenario las tradiciones y los trajes típicos de su tierra. Makeba, nacida en Johannesburgo en 1932, murió el 10 de noviembre recién pasado. Al llegar sus restos a Sudafrica recibió el homenaje de su pueblo y los principales diarios destacaron su compromiso con la lucha anticolonialista. Miriam Makeba con la fuerza inmensa de su talento y su popularidad, asumió que su canto era un instrumento de Liberación y seguirá siéndolo...

RFC

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Estados Unidos: ganó Barack Obama


Por Fernando A. Torres, desde Estados Unidos.

Cuando la expedición de Pánfilo de Narváez atracó cerca de la Bahía de Tampa en Florida, Estebanico, con la brisa caliente acariciando su oscuro rostro, descendió de la lánguida embarcación para entrar en la historia como el primer esclavo africano en pisar la tierra de lo que es hoy los Estados Unidos. Era abril de 1528.

480 años mas tarde, en una reñida contienda de extraordinarios e históricos resultados, un estadounidense de descendencia africana, Barack Obama se convierte en el primer presidente negro del país mas poderoso del planeta.

Hijo de un emigrante de Kenia y de una antropóloga de Texas, Barack Hussein Obama nació en Honolulu, Hawai, el 4 de agosto de 1961. El nombre Barack, traspasado por tres generaciones en su familia paternal, tiene su origen en la palabra “baraka” que en lengua Suahilí significa elegido. Es posible que la palabra se haya incorporado desde Arabia a raíz del intercambio cultural y comercial.

En sus memorias Sueños de mi Padre, un libro publicado en 1995, Barack afirma que gran parte de sus recuerdos de su padre vienen de historias familiares y fotografías. Cuando niño nunca tuvo conciencia de que “mi padre no se parecía a nadie de los que me rodeaban, de que mi padre era negro como el alquitrán y mi madre más blanca que la leche.”

Barack narra lo difícil que fue ser un joven con antepasados multi-étnicos. A tal punto que uso drogas para escaparse de la realidad. Sin embargo recuerda que su paso por Hawai, donde existe una sociedad multi-étnica y respetuosa de la pluralidad, le ayudo en su visión del mundo. Esta experiencia “llego a ser una parte integral de mi visión del mundo y una base para mis mas profundos valores.”


En un país en donde una mayoría blanca controla los círculos más importantes del poder político, el triunfo de Obama es histórico. La hegemonía blanca, que dominó al país por mas de doscientos años ha recibido un remezón que ya se siente, como una ola sísmica, en muchos países del denominado primer mundo y reafirma las esperanzas de sus minorías étnicas subyugadas por un asolapado racismo y clasismo político.

Paradojalmente se elige a un presidente negro para enfrentar una tarea tan difícil, para gobernar y reparar a un país que desde la Guerra Civil de 1861 no había estado tan mal. Hasta ahora, nunca un novato presidente había recibido un país tan plagado de problemas.

Obama recibe a un país sumido en una de sus mas profundas crisis financiera en todos los sectores, un país desmoralizado, con habitantes angustiados por la incertidumbre del futuro, abatidos por la paranoia del “ataque enemigo,” y la compulsiva obsesión por la “seguridad nacional” impuesta por sus lideres (mayormente republicanos)

Obama recibe un país abatido por la inseguridad laboral, con barrios enteros deshaciéndose por la crisis hipotecaria, con estudiantes sumidos en astronómicas deudas, con un inhumano y desastroso sistema de salud, enfrentado a dos guerras producto de invasiones, (sin contar otros focos internacionales en donde se encuentran entrometidos en la actualidad), un déficit que alcanza al trillón de dólares. Obama recibe a un país con una pobre imagen internacional que lo mantiene prácticamente aislado del resto del planeta.

Obama no solo representa la respuesta a ochos años de un miserable control republicano que casi destruyó el país, sino que también representa un cambio de mentalidad y actitud que está comenzando a tocar la fibra mas íntima de la elite ideológica que mantiene al sistema político y económico y alimenta al imperialismo.

Pero lo que mas asusta a esta elite blanca y conservadora es el cambio ideológico que se esta produciendo en forma acelerada. Los jóvenes de dieciocho años que hoy día votaron por primera vez, nacieron en 1990. Para ellos la ideología cultural de la contienda política tiene otros valores y otros caminos. El triunfo de Obama también marca un giro generacional que contrasta con los valores morales de una dirección política ideologizante, exhausta y una dirección espiritual, religiosa, plagada de ortodoxias e hipocresías. La generación de los sesentas le da paso a una generación del nuevo milenio abierta y tolerante, digital, progresista y liberal.

Contra viento y marea, es decir contra la poderosa maquinaria demócrata de los Clinton y en muchos casos en contra de la vetusta dirección política afro-americana, Obama, con sus 47 años de edad, logró armar una campaña electoral triunfante que movilizo a las nuevas generaciones en la creación de un movimiento que lo podría mantener en el gobierno por los próximos ocho años.

Atrás han quedado las generaciones marcadas por la guerra de Vietnam y por los emancipadores sesentas. Para la mayoría de los jóvenes que no se acuerdan del actor llamado Reagan, los temas culturales favoritos de los medios de comunicación como el aborto, la libre elección, la inmigración y los derechos de los homosexuales, son aceptados como derechos tan comunes como usar la computadora o las comunicaciones electrónicas.

Una anciana de 101 años de edad y un joven punk sufragan por primera vez. Si se tuviera que elegir una palabra para definir el ambiente que se vive en este país la palabra sería “cambio.” Fue la esperanza del cambio la que llevó a millones de ciudadanos - en cantidades nunca antes vistas en este apático sistema electoral - a las urnas. El régimen ultraderechista de Bush, lo insólito de su absurdo carácter, su desfachatez guerrerista, fueron sin duda la razón principal del aceleramiento del clamor por el cambio.

Pero responder a estos nuevos desafíos y entender el mandato entre líneas entregado en estas elecciones es una de las tareas más difíciles que enfrenta el nuevo Presidente. Si el cambio es verdadero, el nuevo Presidente tendrá que recomponer a la desgastada clase media, controlar el desbocado sistema financiero, reenfocar las prioridades presupuestarias, terminar las guerras, imponer un sistema de salud universal, crear empleos, reingresar al concierto del resto de las naciones civilizadas del planeta, desechar la mentalidad guerrerista de dominación global, acabar con mentalidad de victima y el papel de victimario, cancelar el arrogante y mortal auto derecho del ataque preventivo y sumarse al diálogo y la diplomacia internacional.


Por su experiencia como esclavo en tres continentes, el autodidacta Estebanico - quien cuando niño fue vendido como esclavo en su país Marruecos - se ganó el respeto de sus dueños y se convirtió en “carne de cañón” de expedicionarios españoles y portugueses. El Negro Esteban, el Moro, fue el primero en ser enviado a lo desconocido, a explorar lugares peligrosos, a mediar con la población indígena en las costas del Golfo de México. Según los registros de Cabeza de Vaca, después de la desastrosa expedición de Narváez, Estebanico estuvo perdido junto a otros tres expedicionarios por casi ocho años en las costas del golfo.

Según Cabeza de Vaca, que también perdido se encontró con el grupo en el séptimo año, Estebanico tuvo que utilizar su ingenio, creatividad y su conocimiento para sobrevivir la odisea. Fue recibido por muchas tribus como un curandero de extraordinarios poderes. Su educación y experiencia le sirvió para sobrevivir.

Adelantado a la penetración de los conquistadores que buscaban las míticas Siete Ciudades de Cíbola, Estebanico llegó al pueblo de Cíbola, conocido hoy como las ruinas de Hawikuh en el Estado de Nuevo México. Allí le anunció a la población indígena de que era un enviado del hombre blanco que llegaría muy pronto al lugar. Los ancianos del pueblo, sospechosos de que un negro era enviado del hombre blanco y de sus peticiones de piedras preciosas, decidieron matarlo.

Esta claro, aunque el peligro esta siempre presente, no se puede comparar a Obama con Estabanico. Pero si se puede decir que, ubicados en puntos extremos de la historia, ambos expedicionarios lograron hazañas que le cambiaron el rumbo al país. Si la mudanza es visionaria, Obama, con una fresca mayoría demócrata en el Parlamento hasta podría cambiar el segregador sistema electoral hacia una persona un voto y darle un verdadero vuelco democrático al país.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Obispo negro: ante posible triunfo de Obama.


"Será, creo, algo fantástico para los negros de todo el mundo. Los que lo aclamaron en Alemania no eran solo negros. Eso augura una nueva era. Nacerá una nueva era cuando Obama se mude a la Casa Blanca" fue la respuesta del arzobispo anglicano Desmond Tutu al ser consultado acerca del posible triunfo de Barack Obama en las elecciones de los Estados Unidos.

El pacifista sudafricano, que adquirió fama internacional durante la década de 1980 a causa de su oposición al régimen de segregación racial institucionalizada en perjuicio de la mayoría negra, conocido como apartheid, agregó que, "esperamos que el nuevo gobierno se quite de encima la fea mancha de Guantánamo, que deje de ser el país que hace posible que sucedan cosas como las torturas en la cárcel iraquí de Abu Ghraib"

El primer obispo anglicano negro de Sudáfrica y premio Nobel de la Paz, en la entrevista concedida a la agencia IPS sostuvo que, "los países ricos deben revisar los principios fundamentales del capitalismo. Creo que el capitalismo tiende a alentar algunos de los aspectos menos nobles del carácter humano"

Tutu quien fuera nombrado director de la Comisión de Verdad y Reconciliación creada en su momento por Nelson Mandela, hoy patrocina negociaciones internacionales de paz y enseña los caminos de la justicia y la no violencia en las principales universidades del mundo.

Desmond Tutu, en la entrevista mencionada se refirió a los Estados Unidos, "a veces se habla de sentimientos antiestadounidenses fuera de Estados Unidos. No es ésa mi experiencia. Hay, por cierto, resentimiento en muchas partes del mundo contra un Estados Unidos arrogante y unilateral, al que se ve como un niño pendenciero. Un país que se niega a firmar el Protocolo de Kyoto cuando el resto del mundo es consciente de que el cambio climático es una amenaza muy real contra la mera existencia de la humanidad. Un país que invade a Iraq, algo que muchos ni siquiera imaginaban y que se convirtió en un horrendo desastre"

RFC

domingo, 2 de noviembre de 2008

Empresario sugiere rebajar sueldos


“Si la actividad nacional se desacelera el desempleo va a aumentar y por eso que es necesario y hemos siempre predicado de tener una legislación laboral con más estabilidad que pudiera permitir… hay miles de formas que creo que son más interesantes que despedir gente, no es cierto, y si Chile tuviera una mayor flexibilidad que es pactar quizás rebajas de salario que puedan ser devueltos con posterioridad una vez que el ciclo económico sea más boyante”

Es para leerlo y no creerlo, pero la verdad es que lo dijo. Y si lo dijo por algo será. Hernán Guillermo Somerville Senn, un empresario de pelo largo y trajes a rayas, presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras, lo dijo con todas sus letras.

Quizás la proximidad del fin de semana largo, permitió que sus declaraciones pasaran algo inadvertidas, pero lo que es claro, que sus palabras vienen a reforzar la idea que anidan organizaciones sindicales de que, los costos de la crisis financiera, pretende cargarse, una vez más, sobre los hombros de los trabajadores.

Las insinuaciones del dirigente empresarial, se viene a sumar, a las muchas similares que emitidas por el empresariado en el último tiempo, y que buscan instalarse como un sentido común de tal manera que actúen limitando cualquier exigencia de mayores sueldos por parte de la contraparte de los empresarios.

El empleo y los salarios son dos componentes sobre los cuales los empresarios reaccionan inmediatamente cuando las crisis económicas se hacen presentes y ellos buscan disminuir sus costos.

RFC